Divergente, la película

Fui al cine a ver Divergente y salí con ese placentero sabor en la boca que te queda cuando una película hecha de un libro respetó las líneas generales de la trama. Harry Potter, Crepúsculo, Los Juegos del Hambre y Divergente son uno de esos raros casos en los que esta premisa se cumple, muy alejados, por cierto del «desastre» que significó Percy Jackson, Soy el Número Cuatro o Cazadores del Sombras.

Claro está, la película de Divergente no es una copia exacta del libro: hay cosas que pasan que no están en el libro, partes que faltan y explicaciones que se quedan en la mera insinuación (Spoiler: Me hubiese gustado que explicaran más el asunto de los miedos y por qué son tan importantes ya que sustentan en por qué Cuatro es Cuatro. También las puntuaciones finales del entrenamiento). Sin embargo, y a pesar de que nunca fui una gran fanática del libro de Veronica Roth, todo se entiende y tiene sentido.

La primera vez que vemos a los chicos de Osadía saltando del tren para llegar a la escuela casi me da un ataque, pues fue exactamente cómo lo había imaginado. La escena del lanzamiento de los cuchillos también es genial y el primer salto de Tris. En cuanto a la ambientación,  las casas de Abnegación superaron a mi imaginación al igual que las escenas de un Chicago en ruinas, las edificaciones de los Eruditos y la muralla que cerca la ciudad.

Nunca me agradó completamente Tris, pero Shailene Woodley hizo que me gustara.

En cuanto a Cuatro, debo decir que Tobías Eaton es uno de los «patea traseros» mas dulces, honestos y encantadores de toda la literatura juvenil y Theo James NO es ese Cuatro. Primero se ve demasiado mayor y la diferencia de edad con Tris (que casi no existe en el libro) es evidente y abrumadora. También carece de esa vulnerabilidad de Cuatro que te estruja el corazón, sobre todo cuando se enfenta a sus Paisajes del Miedo.

Theo James es un Cuatro completamente diferente: Mayor, serio, duro. ¿Me molestó? ¡Para nada!. De hecho, me quiero casar con él mañana mismo porque ESTOY ENAMORADA.

Aparentemente no causó ese efecto únicamente a mi. En el cine, justo en el momento del famoso beso, se escucharon grititos en la sala y hasta hubo quien sacó su teléfono celular para tomarle una foto a la pantalla ¡Lo Juro!

Divergente ha recaudado en taquilla 147 millones de dólares, Los Juegos del Hambre 407 millones, En Llamas 424 millones, Crepúsculo 190 millones, Harry Potter y la Piedra filosofal 317 millones. Si esas cifras las comparamos con los 88 millones de Percy Jakson en el Ladrón del Rayo, los 55 millones de Soy el Número Cuatro y los 31 millones de Cazadores de Sombras, debería ser obvio que para que una película sobre un libro triunfe en la taquilla SE DEBE RESPETAR EL LIBRO.

A pesar de las evidencias, Hollywood como que aún no lo entiende completamente.